Se disparan los servicios de impermeabilización y mantenimiento en los hogares españoles tras el confinamiento

El confinamiento ha servido a los españoles para que se den cuenta de las carencias de sus casas, y están dispuestos a tomar medidas ahora que la economía comienza a reactivarse, con el fin de evitar problemas futuros, y estar preparados para el invierno y posibles nuevos periodos de aislamiento frente a la Covid-19.

Ya el pasado año, los informes de resultados mostraban la incipiente necesidad de ampliar servicios, con más de 7,5 millones de averías que atender. Y este 2020 los problemas estructurales como consecuencia del agua siguen presentes. Más del 18% de los españoles sufre de goteras y humedades en sus casas.

Situación de la que ya se han percatado muchos ciudadanos, que parecen haberse puesto de acuerdo para mejorar sus casas. Según un Informe sobre el Sector de la Reforma, emitido por Habitissimo, desde verano se ha experimentado un aumento del 36% en las solicitudes para las reformas del hogar.

Un 27% ha contratado servicios de mantenimiento y reparación, y un 9% de dichas demandas está dirigida a cuestiones de aislamiento e impermeabilización. Así mismo, esta tendencia se observa, sobre todo, en las comunidades más pobladas, siendo la protagonista la Comunidad de Madrid, seguida por Barcelona, y también destacan las demandas en Valencia, Alicante, y Sevilla.

La Covid-19 incita al ahorro y genera mayor interés por el mantenimiento de los hogaresA raíz de la crisis provocada por el coronavirus, no solo se ha disparado el ahorro, sino que además ha aumentado la preocupación por el mantenimiento de la vivienda. En concreto, una encuesta elaborada por BBVA refleja que el 61% de los hogares ha reducido sus gastos, y conseguido ahorrar una media de 300 euros al mes.

Mismo porcentaje (61%) de personas que está dispuesta a hacer reformas o reparaciones en su vivienda tras el confinamiento, según la patronal de la reforma Andimac a partir del informe de USP. Así, si bien es cierto que parte de esta disposición se centra en la mejora de zonas recreativas, también se aprecia un aumento en los servicios para mejoras estructurales y mantenimiento, como arreglo de ventanas, aislamientos y trabajos de impermeabilización.

El mercado sigue activo, y los profesionales de mantenimiento y reparación continúan prestando sus servicios, siguiendo las medidas oportunas lanzadas por las autoridades sanitarias. Es decir, equipados con mascarillas y guantes, y manteniendo la distancia de seguridad de al menos dos metros de distancia con el cliente.

Impermeabilizaciones: un servicio cada vez más demandado por los ciudadanosLas aseguradoras observan como las goteras, filtraciones y humedades, desperfectos derivados muchas veces por la falta de impermeabilización, son los que más dinero demandan año tras año. En concreto, solo en viviendas aseguradas se atendieron casi 3 millones de reparaciones de goteras en el año 2019, según un informe de Unespa, la asociación empresarial de las aseguradoras.

Pero las empresas privadas también han observado como ha aumentado la solicitud de este servicio, tal y como ha manifestado el CEO de GTB Rehabilitaciones, Ivan Torres: “aunque las previsiones reflejan que el sector de la reforma y la rehabilitación podría llegar a caer más de un 20% este año, nosotros estamos experimentando resultados al alza estos últimos meses”.

Demanda que ha obligado a reforzar plantillas para dar respuesta a las exigencias del consumidor, quien está cada vez más preocupado por ofrecer a su vivienda las mejores condiciones y estar, así, preparado para cualquier situación que depare la pandemia.

La impermeabilización protege las viviendas y aumenta su aislamientoImpermeabilizar una vivienda es la única solución para evitar goteras y humedades, al tiempo que se mejora la climatización en el interior de los hogares. Con este servicio, se previenen daños estructurales en las viviendas y se les garantiza una mayor vida útil.

El trabajo de impermeabilización consiste en aplicar productos o materiales, por medio de técnicas y sistemas profesionales, que impidan la filtración del agua al interior. Se trata de un proceso que ha de realizarse de forma periódica, y que puede ofrecer una efectividad de entre 3 y 10 años, según el impermeabilizante empleado, y asegurando que haya sido bien aplicado.

En definitiva, un servicio incluido dentro de un sector que, a pesar de la pandemia, parece haber encontrado potenciales clientes, dispuestos a invertir sus ahorros en empresas de calidad que les ayuden a mejorar las condiciones de sus hogares.